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Salud Mental y el Desempeño Laboral

Written by Jorge Padres | 26-nov-2021 6:00:00

No cabe duda que en la actualidad el tener un trabajo y una situación laboral estable es algo muy importante, pues el contexto económico por el que el mundo está atravesando es muy complicado. En este sentido, el desempleo es algo que abunda, por lo que las personas que cuentan con un trabajo son bastante afortunadas. Sin embargo, eso no quiere decir que los empleados no quieran seguir creciendo y tener mejores condiciones laborales, incluso dentro de la misma organización para la que ya laboran. Es decir, de una u otra forma la ambición en los trabajadores es algo común y que incluso favorece a la competencia interna dentro de una organización.

No obstante, hay ocasiones en las que, al lograr esos objetivos de crecer y encontrarse en la situación laboral que deseábamos, no terminamos por asimilar esa situación. Es decir, podemos llegar a autosabotearnos y sentirnos insuficientes para ese puesto que tanto anhelábamos. Este tipo de pensamientos en momentos de éxito y realización son más comunes de lo que parecen, por lo que esa baja autoestima muchas veces termina por, en efecto, vulnerar la carrera profesional de los trabajadores. Por ello, la importancia de identificar esta situación, conocida también como “síndrome del impostor'', es mucha. Es por esto que en este artículo te hablaremos de cómo hacerlo, además de las afectaciones que esto puede traer a la organización y a la vida laboral de los empleados que lo sufren.

¿Qué es el “síndrome del impostor” o autosabotaje laboral?
De acuerdo con el autor Michael Page, el síndrome del impostor es un trastorno psicológico en el cual las personas exitosas son incapaces de asimilar sus logros. Se trata de un fenómeno en el que la persona, a pesar de ser exitosa, y contar con cualidades especiales, no se siente suficiente. Las causas de este síndrome son muy diversas, pero mucho tiene que ver el desarrollo de la personalidad, los primeros años de vida de la persona, así como también las circunstancias actuales y el contexto en el que está viviendo.

La razón por la cual se determina que es un síndrome del “impostor”, es porque, precisamente, la persona que lo padece considera que sus éxitos han sido mera cuestión de suerte y que, por lo tanto, ante la sociedad a pesar del reconocimiento con el que cuenta, es un impostor. Ahora bien, en cuestión laboral, se puede considerar como un autosabotaje, pues no se valora el esfuerzo que se ha hecho para la consecución de determinado puesto. Por lo tanto, aquellos empleados que sufren de este síndrome, no tienen confianza en sí mismos y consideran que no son lo suficientemente capaces para ocupar esa plaza y para la situación laboral en la que se encuentran.

Es así como puede generar diversos problemas, tanto para él mismo, como para la organización para la que labora, así que vamos a analizar estos.

¿Qué afectaciones le puede traer a la situación laboral del trabajador?
No cabe duda que, más allá de los problemas internos que puede traer este conflicto para los empleados que lo sufren, también tiene un impacto negativo en sus vidas, como los siguientes:

Fracaso verdadero
Es evidente que la mente es muy poderosa, más aún cuando se trata de nuestro propio actuar y desempeño en el aspecto laboral. Por esa misma razón, al sugestionarse con la idea de no ser suficientemente capaz o de no tener la habilidad para desarrollarse en un puesto de trabajo importante, es posible que, más allá de ser mentira, terminemos por hacer que esos escenarios se vuelvan realidad.

En este sentido, la vida laboral de los empleados que sufren del síndrome del impostor puede llegar a un punto en el que sea un verdadero fracaso. Es decir, con la sugestión de ideas negativas sobre ellos y sobre su desempeño, estos trabajadores pueden terminar por mimetizarse en esos falsos pensamientos y fracasar en su vida laboral. Es por esa razón que siempre es importante identificar a tiempo este tipo de fenómenos, incluso en nosotros mismos, para actuar en contra de ellos lo más rápido posible y evitar una situación como la planteada en este punto.

Baja competitividad en el ámbito laboral
Ahora bien, de igual forma hay que considerar el aspecto exterior en el que este síndrome y la baja autoestima pueden terminar por afectar a los colaboradores que sufren de ello. En este sentido, también puede mermar su competitividad en el mercado laboral, pues al final de cuentas, tener tan baja confianza en sí mismo, genera que la capacidad y el desarrollo de las actividades de los empleados baje.

Por ende, a pesar de contar con todas las habilidades en comparación con otros prospectos para conseguir otro trabajo o, incluso, con algún compañero dentro de la organización, la falta de confianza puede generar que, al compararse con ellos, los empleados con síndrome del impostor no se sientan a la altura y se desmotiven. De esta manera, al momento en que necesites sacar a relucir tus habilidades, la inseguridad hará que esas capacidades no sobresalgan como habitualmente lo harían con una autoestima alta.

¿Qué afectaciones le puede traer a la organización?
Por otro lado, la empresa para la que este tipo de empleados laboran también llega a tener problemas por estas cuestiones, así que vamos a revisar algunos de ellos a continuación:

Menor desempeño
Así como el trabajador que sufre síndrome del impostor baja su productividad, también lo puede hacer la organización en general, por lo que esto puede ser un problema bastante grave para cualquier empresa. Esto sobre todo sucede porque, como aquellos empleados que sufren de baja autoestima a pesar de su situación laboral, también las empresas terminan por bajar su desempeño y creerse que de verdad son insuficientes para realizar sus labores.

De igual forma, es más común que la organización vea una verdadera afectación en su desempeño cuando los colaboradores que no tiene confianza en sí mismo utilizan puestos con mayor jerarquía, pues terminan por contagiar a algunos de sus subordinados o, por el contrario, los dejan a la deriva. Por ende, este es el principal problema que la organización puede ver ante el síndrome del impostor de alguno o más trabajadores.

¿Cómo identificarlo?
Como hemos podido observar, son diferentes los problemas colaterales que este síndrome puede causar, por lo que es importante identificarlo para solucionarlo. Algunas de las acciones que caracterizan a los empleados que sufren de él, son las siguientes:

Perfeccionismo
Evidentemente, cuando alguien no se siente lo suficientemente capaz de realizar alguna actividad, buscará la perfección a como dé lugar. Entonces, uno de los principales indicadores que nos pueden hablar de que alguien (o tú mismo) sufre del síndrome del impostor es el ser perfeccionista. Incluso puede dejar algunos trabajos inconclusos con el argumento de que puede realizarlos mejor o hacerle cambios, cuando en realidad dichas labores están hechas con calidad.

De acuerdo a OCC Mundial, las personas que tienen baja autoestima con respecto a su puesto en ocasiones ni siquiera comienzan sus labores, pues se consideran incapaces de realizarlas de forma correcta.

Procrastinación
Algo que va muy de la mano con el punto anterior es la postergación de algunas labores por la falta de confianza en la capacidad para realizarlas. Básicamente se puede decir que se tiene miedo a hacer algo mal incluso antes de iniciar con ello. Por ello, este tipo de personas deja todo para después, pues no considera ningún momento el indicado para empezar a hacer esas labores.

De esta forma, se vuelve muy común que no se cumpla con los plazos requeridos en su organización y que, en efecto, eso sea motivo de un regaño, lo que hará que su autoestima baje aún más. Es decir, a pesar de que se tuvo todo el tiempo posible para realizar determinadas actividades, así como la capacidad, los empleados que se vean en esta situación se sentirán frustrados y habrán sido víctimas de un autosabotaje.

Individualismo
Este individualismo del que nos referimos, podemos hablar de que también va relacionado con el punto anterior, en el que se tiene miedo de demostrar incapacidad. Aquellos empleados que tienden a autosabotearse suelen preferir hacer por ellos mismos todas sus labores, incluso cuando carecen de tiempo para concluirlas o, en efecto, de algunos conocimientos. Esto se da porque consideran que si piden ayuda de alguien más mostrarán incapacidad, misma que ante los ojos de sus compañeros o jefes puede verse como debilidad o incompetencia.

Es así como llegan a tener problemas con la conclusión de ciertas tareas o labores, lo que los hace sentir incapaces y, por lo tanto, reafirman (erróneamente) esa idea de que no merecen el puesto en el que se encuentran. Además, consideran que no es normal necesitar la ayuda de otras personas, por lo que, en lugar de pedir ayuda para realizar bien sus labores, prefiere hacerlas sin apoyo con el riesgo de que salgan mal.


Conclusión


La seguridad y la autoestima son muy importantes para la salud mental de cualquier persona, pero también para que en el aspecto laboral se pueda desarrollar de buena manera. Por eso mismo, el síndrome del impostor es un mal que puede afectar diferentes esferas de la vida laboral de cualquier trabajador. Por lo tanto, es de suma importancia identificarlo a tiempo, ya sea en uno mismo, en algún compañero o subordinado. Para ello, en People-Cloud contamos con la mejor plataforma en donde podrás lleva a cabo evaluaciones psicométricas, encuestas de satisfacción, NOM-035 y procesos de Desempeño completos con interpretación gráfica de resultados para la toma de decisiones. Agenda una demo y conoce el potencial de PeopleCloud.