Comencemos por definir lo que “Gestión de la productividad” significa. De acuerdo con la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, se trata del desarrollo de procesos en la empresa u organización establecidos para darle dirección a las acciones de sus integrantes hacia un mejoramiento de la productividad.
Sabemos que la productividad constituye la base y la razón de ser de todas las empresas. Cualquier empresa busca obtener un beneficio económico a partir de los servicios o productos que ofrece y entre mayor sea este beneficio, mucho mejor. Es por eso que se deben tener procesos muy claros que permitan gestionar esta productividad, y más en estos tiempos que han sido marcados por la pandemia global del Covid-19.
Siempre se ha sabido que las empresas que logran adaptarse mejor al cambio son las que logran trascender. Ante la situación actual, esta aseveración se ha vuelto más cierta que nunca. Con los cambios que el coronavirus ha traído a nuestras vidas, y de forma particular a nuestro entorno laboral, las empresas están enfrentando un contexto completamente nuevo y para el cual jamás pudieron prepararse. Porque seamos honestos, ni el mejor analista de riesgos pudo prever una situación como la que estamos enfrentando. Esta es la realidad que estamos viviendo y poco podemos hacer para cambiarla, por lo tanto, lo que toca es adaptarnos a ella de la mejor manera posible.
La primera medida que consideramos prioritaria es entender que, por ahora, optimizar los costos y reducir los gastos ha dejado de ser sólo un objetivo para convertirse en una medida básica de supervivencia. Salvo casos excepcionales, la inmensa mayoría de los negocios han visto afectados sus ingresos, por lo que resistir la crisis de cara al futuro es sin duda el primer paso a dar.
Pero más allá de los ahorros, que pudiera parecer como una respuesta incluso obvia antes la situación actual, la adaptación debe abarcar elementos mucho más profundos de la organización. La estrategia e incluso la misión de la empresa podrán verse afectadas en esta nueva realidad, y para eso, debemos de estar conscientes que los recursos humanos serán nuestro principal activo.
En este período de adaptación, la comunicación y la gestión efectiva del personal serás claves para mantener la seguridad y la motivación del equipo. Para este fin, en PeopleCloud contamos con una serie de herramientas que podrán ser utilizadas desde a nube y con las cuales, los líderes podrán tener un mayor control de la organización. Desde herramientas de comunicación a distancia hasta controles de vacaciones, permisos, prestaciones y metas. Una gran cantidad de recursos digitales con los cuales se podrá minimizar los impactos negativos para la empresa durante esta pandemia.
El papel de los líderes cobra una relevancia mayor cuando la organización se enfrenta a períodos de crisis, por lo que sobra decir que, en estos momentos, se requiere de un liderazgo sumamente efectivo. Es importante que todas las partes interesadas (colaboradores, socios, proveedores, clientes, acreedores, etc) conozcan la actualidad de la empresa y tengan certeza sobre el rumbo que se tomará. El líder deberá realizar ciertas acciones que aseguren que la productividad al interior de la organización se mantenga en niveles óptimos, o al menos, aceptables:
Finalmente, es importante tener muy en claro que cualquier medida que se tome en estos momentos, debe de ser tomada pensando a futuro. Sabemos que el panorama actual no es el más claro posible y que de un día para otro puede dar un giro de 180°, sin embargo, además de tomar decisiones reactivas e inmediatas, también es importante que nos replanteemos la estrategia de la organización de cara a los próximos años. Eventualmente, la crisis pasará y la organización deberá de entrar en un período de recuperación que será igual o incluso más duro. Es por esto que, si estás considerando reducir tu personal, te recomendamos que lo pienses dos veces. Tarde o temprano, tu organización requerirá de sus conocimientos y de su experiencia.