La adopción de la tecnología es inevitable, herramientas digitales que facilitan las actividades diarias se están haciendo presentes en todos los sectores, y el mercado laboral no es la excepción. Dispositivos móviles como smartphones y tablets llegaron no sólo para facilitar las actividades cotidianas, sino para romper las fronteras entre el mundo físico y el digital. Y es que los profesionales, especialmente los pertenecientes a nuevas generaciones, se apoyan en estos equipos para ingresar a la nube.
Este nuevo modelo de servicio que permite guardar información en Internet y acceder a ella en el momento que sea necesario, está revolucionando la forma de trabajo en las empresas. Y aunque todavía hay quienes se resisten al uso de estas plataformas, la realidad es que apuestan por ellas cuando de eficientar actividades se trata. No hay duda que las compañías, ahora, están invirtiendo en una comunidad móvil donde trabajadores y líderes se comuniquen en tiempo real sin importar el lugar donde se encuentren.
Dale el sí a la nube
La tendencia de usar este tipo de plataformas colaborativas va en aumento. Las soluciones y alternativas que éstas ofrecen no son nada despreciables, al contrario, satisfacen grandes necesidades de las compañías. A continuación los principales beneficios de trabajar en la nube:
- Movilidad. Debido a que los archivos de la organización están almacenados en Internet, no se necesita estar en un espacio físico determinado o estar cargando con un paquete de papeles para acceder a ellos. Basta con tener un dispositivo tecnológico conectado a una red para consultarlos.
- Trabajo colaborativo. Compartir documentos en la nube conduce directamente a una mayor colaboración de los usuarios que tiene acceso a ellos. Múltiples profesionales, ubicados en lugares remotos, pueden colaborar fácilmente en los proyectos, opinar respecto al desempeño de los demás y asegurarse de que están trabajando en la última versión del archivo, ya que la nube siempre alberga el documento más reciente.
- Reducción de gastos. Puesto que un mismo programa es compartido por muchos usuarios, no hay necesidad de comprar una copia individual para cada integrante, lo que abarata los precios de las aplicaciones. Además, el ahorro también se hace en los dispositivos, ya que se puede utilizar cualquier herramienta tecnológica, como smartphones y tablets, para acceder a los documentos. No hay que olvidar que tampoco se invierte en mantenimiento o solución de problemas informáticos, ya que el proveedor de la nube es quien se asegura que el servidor funcione sin inconvenientes.
- Escalabilidad. Este punto se vuelve crucial para las empresas. Y es que un sistema informático se vuelve escalable únicamente si crece para satisfacer las necesidades más exigentes de los colaboradores: la nube lo hace, esta plataforma colaborativa garantiza que, según lo requerido, se aumente la capacidad de proceso o el almacenamiento de la herramienta, lo que además optimiza los recursos en todo momento.
- Updates. Una de las ventajas que tienen las empresas que contratan un sistema informático es que tienen la posibilidad de actualizar constantemente el software. De hecho, ni siquiera tienen porqué preocuparse de esta actividad, ya que el proveedor del servicio es el que se encarga de instalar las nuevas funcionalidades de la herramienta, por lo que se puede decir que las mejoras se hacen automáticamente sin afectaciones negativas al usuario.
A favor de la seguridad
Una de las dudas más comunes que se tienen sobre la nube es acerca de su seguridad; la realidad es que la información no corre ningún peligro. Las industrias que desarrollan estas plataformas están certificadas internacionalmente para evitar amenazas cibernéticas.
Los proveedores se encargan de proteger adecuadamente la información de la compañía a la que prestan el servicio; se aseguran de instalar un firewall y una serie de controles y procedimientos que ayudan a identificar y desviar ataques cibernéticos. Además, se cuenta con múltiples enlaces a la red para garantizar la continuidad y disponibilidad del servicio, equilibrando así el tráfico saliente y entrante para garantizar el buen funcionamiento.
Ejemplos de como utilizar la nube
Existen servicios que facilitan la gestión de talento, en donde el líder del área de recursos humanos puede crear proyectos e ir agregando a los integrantes que se encargarán de desarrollarlos; de esta manera evalúa su desempeño, los califica según las actividades realizadas y –a través de un chat– puede ofrecer retroalimentación directamente.
Lo mismo sucede en el área de ventas, donde los profesionales pueden registrar, gestionar y analizar toda la actividad de los clientes en un solo lugar. De hecho, permiten generar campañas personalizadas, según las necesidades de cada usuario, y de esta manera cerrar acuerdos más rápido. Asimismo, registrar llamadas, responder a clientes potenciales y brindar una experiencia de venta satisfactoria que garantice una segunda compra.
Como podemos darnos cuenta, adoptar la nube como forma de trabajo es sencillo y sólo basta supervisar la plataforma, integrar a los miembros del equipo, gestionar la primera actividad a realizar y supervisar que todo vaya viento en popa. Aprovecha los beneficios que la tecnología tiene para ti.